26 enero 2008

Limitaciones de la Lengua


Sólo hay mundo donde hay lenguaje
Martin Heidegger

El otro día reflexionaba para conmigo sobre os detalles. Ya lo he había hecho más de una vez, y es más, creo tener alguna entrada hablando del tema. No llegué a ninguna conclusión sobre los detalles; pero me enredé en otra reflexión con nada que ver con los detalles. Es increíble como divagan los pensamientos.

Pensé en la frase de Wilde “los detalles son siempre vulgares”. Claro, mi reflexión sobre los detalles no concluía precisamente como la interpretación de Wilde. Posteriormente caí en que cada uno nos referíamos a unos tipos de detalles distintos, y sin embargo, ambos lo llamábamos de igual manera.

Al igual que sucede con la palabra “detalle”, sucede con una infinidad de vocablos más. El lenguaje nos limita. La lengua, que es la misma que nos da la capacidad de pensamiento, nos limita éste. El límite del pensamiento se encuentra en el lenguaje.

De igual manera ocurre con las traducciones. No hay equivalencia exacta entre idiomas, y esta falta de correspondencia puede ocasionar malentendidos de calado internacional e histórico. Supongamos que la primera traducción de un manuscrito científico se traduce mal; y que el original se pierde. Todo el resto de traducciones posteriores cargan con el error. ¿Y quién nos dice que esto no haya pasado por ejemplo en los textos bíblicos?

Esto no hace más que ahondar mi ya pronunciado escepticismo. El hecho de encontrar, como le sucedía a Descartes, una verdad irrefutable sobre la que asentar un conocimiento, agobia; y aunque ese agobio no sirva para nada, ni nunca jamás vaya resolver nada, tengo la necesidad de cuestionarlo todos los días.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gonzalo, no sé si lo habrás pensado, pero si yo fuera tú, todas estas reflexiones que pones en el blog las podrías recoger en un libro. Pensamientos como el de esta entrada son muy interesantes, y no estaría mal tenerlos todos juntos, para poder leer buenas reflexiones. Un proyecto que te animo a hacer ;-)

Un saludo y continua en esta línea, que es un verdadero disfrute leer el blog.

PD: Curiosamente, el viernes compré El retrato de Dorian Grey, así que me lo leeré en breve. Tomo nota de la recomendación